Hizo su trabajo

El primer minuto de arranque fue muy dinámico desde los dos lados. Empezaron palo a palo y fue un pasaje muy disputado en las penetraciones. Peñarol supo leer bien su ataque y resolver su defensa. Después de empatar en 4 Peña metió un parcial de 10-0 antes de llegar a la mitad del cuarto para alejarse 14-4 y forzar el tiempo muerto de Picatto. El entrenador de la selección argentina vio que la defensa estaba totalmente desordenada, se abrió por momentos (2 triples de Gaines) y en ataque perdió mucho en el 1vs1.

Pasado el promedio del cuarto, las cosas se emparejaron. Peñarol perdió terreno en el poste e Hispano aprovechó la aparición de Barlow para descontar. El milrayitas volvió a sus fuentes. Jugó bien espaciado y se pasó bien la bola (2 triples desde esquinas) para escaparse otra vez. Del otro lado presionó bien obligando a los del sur a jugar con mucho individualismo (Bueno 7 puntos). El cuarto terminó 27-11.

En el amanecer del segundo chico, los de Mar del Plata siguieron en la misma sintonía. Rotaron el banco y no perdieron ritmo, siguiendo la idea impuesta por Ramella de defender en 3/4 de cancha y jugar con calma del otro lado. Hispano siguió con arrebatos individuales, no ejecutó bien el pick and roll, se complico con la presión rival y no encontró la vía para llegar aunque sea a los 20 puntos. Con un parcial de 8-0 sin mezquina ese nada, los marplatenses se pusieron 37-18.

Peñarol se floreó recuperando balones, corriendo la cancha y anotando. En los tableros, Penachiotti se hizo fuerte y del otro lado aprovecharon distracciones del flojo box out sureño y tuvieron segundas oportunidades de la mano de Monacchi y Mitchell. Después de un lindo doble de Gaines, la máxima del conjunto de la feliz fue de 23. Los últimos 4 minutos fueron más pasivos. Las revoluciones de Peñarol bajaron un poco pero nunca perdió el control del juego. El parcial de este pasaje de tiempo fue 8-7. Ambos se fueron al descanso largo con el marcador 45-25.

Al volver de lo vestuarios, Hispano se mostró más activo y jugó más organizado para descontar de la mano de Gallegos (5) y Barlow. En 2:30 se puso 35-51. En la continuación, volvieron a aparecer Mitchell y Gaines para poner paños fríos a la situación y sacar una nueva máxima de 24 con un 10-0 (61-37). Hispano no pudo contener en defensa a los rompimientos de Gaines (17 hasta el momento).

En ataque, más allá de la defensa milrayita, los de Picatto no mostraron idea de juego con mucho individualismo. Lo que si mostraron son signos de frustración e impotencia. La máxima ventaja de Peñarol se siguió agrandando con tantos de Monacchi y Valinotti. El cuarto cerró con un parcial altísimo (34-20) y de cara a los últimos diez minutos el marcador fue 79-45.

El último cuarto fue solo para cumplir el reglamento. Ninguno de los dos equipos puso suplentes en los primeros dos minutos, para analizar un poco el panorama. Más adelante los entrenadores comenzaron a rotar las bancas, en especial Ramella. Picatto no bajo los brazos y su equipo pudo achicar algo de la mano de Sansimoni y Cooper. En la mitad del cuarto bajó la diferencia a 25 (87-62).

Peñarol lo supo aguantar con su segunda alineación a pesar de su poca efectividad y baja en el rendimiento colectivo. Con juveniles en cancha cerró el partido Hispano y se acercó un poquito más. El partido finalizó con victoria para Peñarol por 95-73. Ahora Hispano tiene que cerrar victorioso su fase regular para ver si puede clasificar a Playoffs mientras que Peñarol disputó su último juego y quedó a la espera de resultados en estos últimos días.

La figura: El rendimiento colectivo de Peñarol. Se lució con su quinteto titular con más de 14 puntos y 4 de los 5 con 4 o más asistencias. El goleador fue Valinotti con 19. Monacchi y Penacchiotti terminaron en doble doble figura.

Octavio Escalada
Pick&Roll