Instituto llega con diferentes virtudes para ir por el título de la Liga Nacional. Su defensa, la intensidad propuesta, y sobre todo los tres enormes partidos que hizo como visitante. Presencias individuales y colectivas determinantes que lo ilusionan con ser campeón. Te lo contamos.
Autor:Jose Fiebig (@Josefiebig en twitter)
Instituto llega con diferentes virtudes para ir por el título de la Liga Nacional. Su defensa, la intensidad propuesta, y sobre todo los tres enormes partidos que hizo como visitante. Presencias individuales y colectivas determinantes que lo ilusionan con ser campeón. Te lo contamos.
La gloria ya pasó por todos los estadios dentro de la serie final ante Boca. Desde el éxtasis del primer partido y romper la localía, ceder la ventaja en el tercer encuentro, la lesión de Pomoli, levantar un match point y dejar la vida en diferentes encuentros donde logró imponerse físicamente y sobre todo con un par de defensas de alto impacto para minimizar a Boca y su ofensiva.
Si hablamos de los quintetos que más resultado le han dado a Instituto, hay que hablar de sus titulares. Vildoza - Negrete - Lugarini - Pomoli - Saiz fueron determinantes para sacar ventajas en el juego en velocidad, abriendo la cancha en el 5x5 y con los switch defensivos. La gloria bajó su rendimiento cuando la segunda estuvo en cancha, algo que necesitará que cambie pensando en el Juego 7.
Los momentos de Negrete y Lugarini son alucinantes en la serie. Ambos vienen rompiendo el molde en acciones de transición, defensas altas y su categoría para atacar y lastimar. Imposible dejar de lado a Nicola Pomoli, quien demostró, que cuando está en cancha es determinante con su potencia, determinación, personalidad y gol.
Las grandes noticias para Instituto llegaron en el Juego 6. Copello y Monacchi dieron un paso al frente, sumado a un Aaliya que volvió a mostrar su presencia y capacidad atlética para sintonizar con el resto. Holt sigue sumamente ausente al igual que Guerra por momentos. Cuantas más variantes encuentre dentro de su andar versátil, más chances tendrá de coronarse.
Su intensidad y defensa. Instituto demostró que cuando dejó el alma desde lo defensivo en los ajustes, trap o situaciones de cambio pudo adueñarse de los partidos. Lo hizo en el Juego 1 y ambos que ganó de local. Supo sacar del juego a Vildoza, obligarlo a malos lanzamientos, ganar en el 1x1 en transición por cada recupero y adueñarse del rebote. Dejó la piel atrás con un colectivo que rindió. Deberá repetir en ese aspecto.