Va templando el alma

Salta Basket, que ya sabe que jugará play offs por la permanencia con desventaja deportiva, dio una prueba de carácter muy grande al superar a Regatas 85-80 en suplementario y con las ausencias de Gerbaudo y Zilli. Diego Figueredo el MVP con 26 puntos.

Autor:Pablo Tosal (ptosal@pickandroll.net)

El primer tiempo fue de bajo vuelo ofensivo. Ninguno de los dos equipos pudo aprovechar las ventajas del perímetro sobre defensas que se cerraron permanentemente para cuidar su aro con mucha gente.

Salta Basket, que ahora lo tiene a Leo Hiriart como entrenador en jefe, luego de la salida de DeCecco por un problema familiar, tuvo que soportar dos bajas muy sensibles. Salió sin su base titular Diego Gerbaudo, con una molestia en la zona donde se curó del desgarro y por precaución evitaron que la sobre carga pase a mayores y sin el pivote Alejandro Zilli, uno de los líderes y referentes del equipo.

Esta situación le acortó mucho la rotación al técnico de Los Infernales, pero los primeros pasajes le favorecieron (6-0) de todos modos, se quedó sin gol con dos pérdidas y algunos tiros mal tomados y Regatas reaccionó para tomar la delantera (6-7) promediando el cuarto. Desde allí la paridad fue el denominador común cerrando el primer segmento 14-12 para el local con 0/4 en triples para el local, mientras la visita tuvo 2/5. Las opciones de poste bajo fueron los mayores réditos de Salta Basket.

En el segundo cuarto regresó Paolo Quinteros y el equipo tuvo mayor caudal ofensivo nuevamente con él como bandera. Rompió para su mano en bandeja, rompió para pasar a los ángulos, aglutinó defensa y Regatas se sintió más cómodo para gobernar el tablero (20-25).

Pero nunca fue mucha la diferencia. Figueredo marcó el ritmo ofensivo y aparecieron Harris y Williams en el local para dar una mano en ataque y llevar nuevamente paridad. Salta sufriócon el 1/8 en triples del primer tiempo mientras que Regatas usó mucho el tiro perimetral con 5/13. Finalmente el primer tiempo se lo llevó la visita 29-30 en el marco de un partido discreto.

En el inicio del tercer cuarto Regatas manejo una ventajita en el marcador de 4 puntos (de 31-35 a 36-40 con Quinteros, Ramírez Barrios y Vidal) pero le duró poco se encendió Ricky Harris bien acompañado por Espinoza para tomar la delantera 41-40.

Emilio Stucky y Pablo Espinoza tuvieron que esforzarse al máximo para contener el poste bajo de Regatas ante la ausencia de Zilli y la visita quiso poner allí su fuerza. Por suerte para Salta Chevon Troutman está en un momento muy apagado y no gravitó, teniendo que salir siempre Fernando Martina para poner algo de presencia en el juego interior.

El cuarto transcurrió con mucha paridad hasta el 48-48 a falta de 2:40 porque desde allí Regatas hizo gala de su equipo más largo y con más energía pudo correr y sacar ventajas para cerrar arriba 48-55 y parcial de 0-7 para entrar al último cuarto.

El último cuarto abrió con un parcial de 0-4 para la visita con Salta errando dos triples y Regatas aprovechando todo. Así sacó la máxima distancia de 11 (48-59). Hiriat tuvo que pedir un minuto muy rápido para frenar el juego.

Al regreso del minuto, Salta metió una secuencia de tres buenas defensas seguidas, un doble de Espinoza y un triple de Figueredo (tras rompimiento de Harris) y una corrida de contraataque de Diego Figueredo para achicar a 4 (55-59 a falta de 7:25). Piccato tuvo que parar el juego con un minuto.

En ataque, Salta se dejó guiar por la mano caliente de Diego Figueredo. Además Leon Williams cerró muy bien su canasto y todo el equipo local subió su nivel de energía y complicó a un obnubilado Regatas hasta pasar al frente 64-62 con parcial 16-3.

Después del minuto de Piccato, reingreso Paolo Quinteros que siempre se acciona como el “Botón de pánico” y una vez más el extraordinario goleador se hizo cargo de todo para pasar al frente 64-69 con 7seguidos de Paolo.

De todos modos Salta no se dio vencido y siguió peleando el partido desde su defensa para poder tener la chance sobre el cierre con 4 libres de Harris de empatar el juego. Hubo tiempo para una corrida final de Vidal que terminó con bandeja errada (ante el salto de Espinoza) y el rebote le quedó solo a Saiz abajo del aro y no pudo convertir. Así el juego terminó empatado en 72 y se fue a suplementario.

En el suplementario estuvo mejor parado Regatas al principio con una gran participación ofensiva de Fernando Martina que ayudó a su equipo a sacar 4 puntos vitales (76-80) a falta de 1:50 para que llegue el pedido de minuto de Hiriart.

Al regreso Los Infernales metieron un par de atropellos decisivos. Un triple de Espinoza por el eje, y otro triple de Figueredo desde el corner para sacar provecho de los dos triples errados de Regatas (Paolo y Saiz). Los correntinos se quedaron sin ideas en el cierre y los dos bombazos de los salteños lo volvieron a la vida (82-80) pero inexplicablemente el español Carlos Cabeza pateó el balón al techo del polideportivo Delmi en señal de fastidio ganándose la falta técnica.

Harris cobró la falta y luego Lucas Goldemberg decoró el resultado final (85-80) de un juego vibrante, emocionante pero de bajo vuelo. Demostrando porqué son los dos equipos de peor racha actual en lo últimos 10 partidos (2/8). Salta Basket demostró más, tuvo coraje y quiso más el triunfo. Tuvo la virtud de no rendirse y ser un poco más certero en el cierre. Y fundamentalmente lo hizo con dos ausencias claves. Todo eso suma un valor agregado muy alto.