San Lorenzo - Peñarol

San Lorenzo en modo “play offs”. Ningún rival quiere escuchar eso. El equipo dirigido por Gonzalo García sorteó con mucha habilidad el doble torneo de Liga de las Américas y Liga Nacional, fue llevando cada instancia y compromiso con maestría. Busco los lugares y momentos donde apretar el acelerador y donde bajar el ritmo.

Aunque suene capcioso y no sea más que una apariencia, siempre dio la sensación que San Lorenzo reguló muchos partidos. Los protagonistas podrán decir (con todo derecho y razón) que no fue así. Pero la sensación fue que había siempre algo más bajo el paño. Y entonces San Lorenzo jugó 30 minutos en un nivel Liga Nacional y 10 en otro europeo de primer nivel. O a veces 20 minutos si el partido era muy chivo. O a veces dio lástima, como contra Boca, tres días antes de la final de América.

Le costó unos cuantos cambios de extranjeros (algunos sin pena ni gloria) y desde la salida de Matías Sandes por lesión nunca recuperaron el brillo. Sandes es un conector de la ofensiva en muchos aspectos. Se dividieron en dos cuando Justiz Ferrer empezó a jugar solo de mitad de cancha para adelante y Joel Anthony de mitad de cancha para atrás, entre otros curiosos padeceres. Pero ahora comienza otro torneo para ellos también. Un campeonato que saben jugar, con gente de experiencia, con la idea clara de lo que quieren y cómo lo quieren. Y por supuesto con la riquezas de sus individualidades.

San Lorenzo tiene a Gabriel Deck. Y tiene a Marcos Mata. Y lo tiene al Penka Aguirre. De los 6 jugadores de la actual Selección Nacional San Lorenzo tiene tres. Es el máximo favorito al título y sabe jugar contra presión. Incluso contra la mochila de saber que de obtener la Liga tomaría otro podio: conseguir igualar el récord del tricampeonato.

Debe haber pocas cosas en el deporte más poéticas y más justas que sea precisamente Peñarol, el único tricampeón, quien se ponga primero en su camino para defender ese reinado. San Lorenzo busca también esa corona de pesos pesados.

Justamente el “Milrayitas” llega a este play offs alimentando por la ilusión (¿Qué otra cosa es sino el deporte?). Las apuestas están todas en su contra y larga como el claro invitado a una fiesta ajena. Pero si de algo sabe Peñarol es de estos momentos. Y no solo la historia o la camiseta, porque esos son intangibles difícil de mensurar, sino sus propios jugadores: Nicolás Gianella, Alejandro Diez, Martin Leiva, Diego García, Diego Guaita, ellos saben bien que significa jugar momentos de tensión.

Acaso por eso también Peñarol jugó los dos mejores partidos del año ante La Unión y Ferro para asegurar su permanencia en el cierre de la fase regular. Luego tiró el juego de Comodoro por descanso de sus jugadores. En los momentos de máxima tensión este equipo dio su mejor respuesta de todo el torneo. Y esas cosas en una Liga Nacional de alto nivel no es coincidencia. En el banco de suplente dando órdenes está el jugador más ganador de la historia de la competencia que llega a su primer play offs como entrenador. Para él también comienza un nuevo torneo. Uno que vestido de jugador lo dominó como nadie.

¿Alcanzará para Peñarol la suma de todos estos imponderables para plantarse ante el gran candidato?. El marco del cuadro fue brindado en esta previa pero los que pintan son los jugadores.

Y para muestra de las dificultades a sobrepasar bastan algunos números: el 8 de abril del 2017 San Lorenzo perdió su último partido de local (ante Atenas 99-100). Fue hace tanto tiempo que fue en otro torneo con otro entrenador. Desde allí este equipo suma 32 partidos de Liga sin perder pero le debemos sumar 6 partidos más por el Super 20 de inicio de temporada y 6 más por Liga de las Américas que totalizan 44 juegos seguidos (y más de un año) sin derrotas ante su gente. Un dato apabullante.

El azulgrana anota 88.6 puntos de local mientras que Peñarol suma 79.2 pts de promedio de visitante por juego. Allí habrá una incomodidad inicial para la visita: de qué manera seguir el ritmo de puntos que impone San Lorenzo jugando en casa. Hay una montaña de números para graficar pero destacaremos solamente que el local es el mejor porcentaje en dobles de toda la competencia jugando en dicha condición: 57.1%. Estos dos guarismos abren especulaciones de cómo preferirá Peñarol contener su poste bajo y el ritmo ofensivo de la serie.

San Lorenzo sabe que desde que Todd Brown y Diego García están en el equipo, Peñarol recuperó el tiro de tres puntos perdido. Y deberá tener especial atención en ellos. Y justamente sus presencias en el juego perimetral descongestionaron la pintura para los internos, para Pettigrew y para los rompimientos de Gianella.

Se abre el juego de variantes, sorpresas y ajustes. De emoción y de personalidad. Y con dos nombres propios muy grandes. Hay un lindo plato servido para degustar.

Hora: 21.00
TV: La Liga Contenidos
Árbitros: Fabricio Vito – Alejandro Zanabone y Javier Sánchez
Estadio: Roberto Pando - CASLA

@pablotosal